La medida de alerta y movilización fue resuelta en rechazo al plan de desguace del Gobierno nacional. Denuncian la eliminación de organismos estratégicos y advierten sobre el riesgo de paralización total de la obra pública.
En un clima de creciente tensión, los trabajadores de la Dirección Nacional de Vialidad en La Rioja resolvieron mantenerse en estado de alerta y en asamblea permanente. La decisión fue tomada en rechazo a la política de ajuste que impulsa el Gobierno nacional, y que impacta de manera directa en el funcionamiento del organismo.
El ingeniero Jorge Escudero, jefe del 8º Distrito de Vialidad Nacional, advirtió que la situación es crítica: “Este Gobierno nacional está destruyendo el Estado. Están cerrando organismos estratégicos que hacen a la planificación y ejecución de políticas públicas. En nuestro caso, Vialidad corre el riesgo de quedar completamente paralizada”.
El malestar se profundizó luego de que el Gobierno de Javier Milei oficializara la disolución y transformación de 21 organismos públicos nacionales mediante el Decreto 554/2024, publicado en el Boletín Oficial. La medida incluye reestructuraciones que, según los trabajadores, afectan gravemente a áreas clave como Vialidad, el INTA, el INTI, Parques Nacionales y el Enacom, entre otros.
En La Rioja, la delegación local de Vialidad Nacional ya sufre recortes presupuestarios, demoras en las transferencias de fondos y falta de insumos esenciales. Esta situación afecta no solo a los empleados del organismo, sino también a los cientos de trabajadores de la obra pública que dependen indirectamente de su funcionamiento.